Pastoral Vocacional
Mercedarios
Argentina
CRISTO REDENTOR, MAESTRO Y MODELO DEL MERCEDARIO
III. Rasgos de la
persona de Cristo Redentor de significación especial para San Pedro Nolasco
8. Apoyados en la primitiva tradición mercedaria,
fijada en el prólogo de las constituciones Amerianas de 1272, y continuada, sin
interrupción, a través de los setecientos ochenta años de vida de Nuestra Orden
de la Merced en la Iglesia y encarnada de modo especial en el Cuarto Voto,
hemos coincidido en señalar, como rasgo central y significativo del Cristo
Redentor para San Pedro Nolasco, la Actitud del Hijo que, obediente al Padre,
ofrece libre y voluntariamente su vida por al humanidad, en un acto de gratuita
y amorosa entrega que, a la vez, es VISITA de amigo y REDENCIÓN a precio de
sangre.
9. Otro rasgo esencial de la Persona de
Cristo Redentor que se imprimió profundamente en la mente, corazón y vida de
San Pedro Nolasco y en sus frailes fue la sabia disposición, según la cual Dios
Padre, entre las varias formas de hacer presente a su Hijo Unigénito en este mundo
de pecado y de muerte, para realizar la redención del humano linaje, escogiera
la de hacerle tomar la naturaleza humana en el vientre de la gloriosa VIRGEN
MARÍA por obra de Encarnación hasta la Cruz, la humilde Virgen Nazarena que
supo decir SI a Dios sin condición alguna fue "la socia o compañera
generosa del Divino Redentor".
10. También, a nuestro entender, descubrió
San Pedro Nolasco el secreto de su identificación con los cautivos y oprimidos,
en las palabras con las que Cristo Redentor se identifica con los encarcelados,
enfermos, hambrientos, sedientos, desnudos, y sin techo.
11.
Algunos rasgos más de la persona de Cristo Redentor que sin duda, contribuyeron
a formar la personalidad del santo redentor de cautivos, son los rasgos del
Cristo cumplidos de la vocación como misión signada por el Padre, del Cristo
cercano a los pobres y sencillos, del Cristo que se dio sin esperar nada a
cambio, del Cristo que valoró grandemente la libertad humana y del Cristo que
se presentó siempre como servidor nunca como dueño.
IV.
Lugares situaciones del mundo actual en los que deberíamos y podríamos <<
encarnarnos>> los mercedarios
12. La PALABRA eterna de Dios no redimió a
la humanidad desde la distancia, sino que "se hizo carne" como la
carne pecadora de los hombres y mujeres de su tiempo y de todos los tiempo y
lugares del mundo; y una carne, como la de todos los humanos, expuesta al
sufrimiento y a la muerte.
13. Por su parte, Pedro Nolasco, no se
contentó con enviar a los cautivos mensajes de solidaridad, exhortándoles a la
paciencia y al aguante , sino que, impulsado por el ardor de la fe y por una
caridad más fuerte que la muerte, se metió en la mazmorra de los cautivos,
sintió en su corazón el frío del hierro que los torturaba, paladeó el amargo
sabor de las lágrimas que soltaban los ojos de los infieles, y fue capaz de
convertirse él y de convencer a sus seguidores para que se convirtieran en
precio de rescate, cuando no fueran suficientes ni los bienes ni el oro ni la
plata, para redimir al hermano cautivo.
Lugares de redención
16. En cuanto a los lugares, en los que
debemos y podemos "encarnarnos" los mercedarios, para activar, desde
las entrañas mismas de las nuevas formas de cautividad, nuestro carisma de
redención, es unánime la opinión: allí donde nos encontramos los mercedarios
debemos y podemos insertarnos en alguna de las nuevas formas de cautividad;
pues en un mundo en el que han desaparecido las fronteras para la extrema pobreza,
la explotación del débil, la droga dependencia, la prostitución, la emigración
forzosa y la violencia, no es cuestión de lugares geográficos sino de tacto y
olfato mercedarios para detectar la cautividad que muchos hermanos nuestros
están sufriendo.
(Extracto del MENSAJE DEL CAPITULO GENERAL
DE 1998)
- ¿Qué te llama la atención de esta mirada mercedaria sobre Cristo Redentor?
- Tu búsqueda personal ¿ se identifica con estas miradas carismáticas?
- ¿Qué dificultades encuentras para hacer realidad el carisma mercedario en tu vida?